junio 27, 2025
Colectivos LGTBIQ+ agradecen el trabajo de la concejalía de Acción Social, pero lamentan la “invisibilidad” por parte del Ayuntamiento de Elche
La plaça de Baix ha acogido esta tarde la lectura de un manifiesto con motivo del Día del Orgullo, que es este sábado 28 de junio.
En el manifiesto, que han leído representantes de diversas entidades, se ha puesto de manifiesto la necesidad de seguir reivindicando los derechos de las personas del colectivo LGTBIQ+.
Se ha criticado la modificación de la ley trans valenciana y “el acompañamiento voluntario que abre la puerta a la terapia de conversión encubierta”.
Igualmente, han censurado las palabras, hace unos meses, de la concejala de Infancia, Familia y Mayores, Aurora Rodil, cuando dijo que las mujeres trans no son mujeres.
Han lamentado que esa afirmación contara con el “apoyo en público y en privado del alcalde”.
Han agradecido, eso sí, el trabajo que se hace desde la concejalía de Acción Social, pero añadiendo que todo “queda eclipsado y empañado por la invisibilización y desprecio que reciben desde alcaldía”.
Aseguran que todo es “invisibilizado desde las redes sociales del Ayuntamiento”.
Al acto han asistido la concejala de Acción Social, Celia Lastra; el portavoz adjunto del PSOE, Mariano Valera; la concejala del PSOE, Patricia Maciá; y la portavoz de Compromís, Esther Díez.
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A continuación, se puede escuchar y leer el manifiesto completo:
“Este 28 de junio el día en el que reivindicamos los derechos de todas las personas del colectivo LGTBIQ+.
56 años han pasado desde aquella primera manifestación en Stonewall y los avances en derechos y libertades son evidentes, pero por primera vez estamos asistiendo a un retroceso de esos derechos.
El Partido Popular junto con Vox han realizado una modificación de la ley trans valenciana, que se había convertido en un referente a nivel estatal desde su aprobación en 2017.
Lo han hecho mediante enmiendas en la ley de acompañamiento a los presupuestos de 2025.
No sólo han vaciado el contenido de esta ley, sino que se han supuesto cambios que atentan contra los derechos del colectivo de manera contundente.
Las modificaciones permiten el acompañamiento voluntario que abre la puerta a la terapia de conversión encubierta.
Estas prácticas han sido clasificadas por la ONU como formas de tortura.
No permitiremos que se cuelen por la puerta de atrás estas prácticas que atentan contra el derecho de autodeterminación y en consecuencia contra los derechos humanos.
No nos tenemos que ir muy lejos, aquí en Elche nuestra concejala de Infancia, Familia y Mayores, Aurora Rodil, afirmaba hace unos meses en una televisión en abierto que las mujeres trans no son mujeres.
Unas declaraciones tránsfobas de las que no sólo no se ha retractado, sino que han recibido el apoyo en público y en privado del máximo representante de nuestra ciudad, su alcalde, Pablo Ruz.
Se ampara en una supuesta libertad de expresión que bajo ningún concepto puede utilizarse para verter discursos de odio contra las personas trans.
Decimos basta a la transfobia desde las instituciones.
El trabajo que se hace desde la concejalía de Acción Social, a la que agradecemos su implicación y predisposición con cada propuesta que realizamos las entidades, queda eclipsado y empañado por la invisibilización y desprecio que reciben desde alcaldía.
Cada acto, charla, proyección o concierto que se realiza es automáticamente invisibilizado desde las redes sociales del Ayuntamiento de Elche.
Ni siquiera los actos del Festival Diversa, organizado desde las concejalías de Juventud y Cultura, tiene cabida en el perfil oficial del Ayuntamiento de Elche.
¿Quieren invisibilizarnos? Gritaremos y nos mostraremos con más fuerza que nunca.
Actualmente el colectivo trans es el colectivo más vulnerado y el que más agresiones está recibiendo sólo por el hecho de visibilizarse. Las enmiendas de la ley trans no ayudan.
Estas modificaciones vulneran nuestros derechos básicos y rompen con los consensos alcanzados tras décadas de lucha social y política.
Desde aquí exigimos la restitución íntegra de los derechos eliminados.
Tenemos el derecho a vivir visibles y con dignidad.
Debemos más que nunca luchar por la igualdad y por el reconocimiento de nuestros derechos para poder vivir sin miedo, sin rechazo y sin discriminación.
El derecho a la libertad de reunión pacífica viene sufriendo cada vez más ataques en toda Europa.
Amnistía Internacional ha documentado restricciones del derecho a la protesta en 21 países, entre ellos Hungría.
Por ello, hemos iniciado una campaña internacional de denuncia de la ley aprobada, porque como ha declarado nuestro compañero, David Vig, director de Amnistía en este país miembro de la Unión Europea, la nueva ley aprobada es un ataque frontal a la comunidad LGBTIAQ+, y una violación flagrante de los Derechos Humanos y de las obligaciones de Hungría de prohibir la discriminación y garantizar la libertad de expresión y de reunión pacífica.
Este año el orgullo de Budapest cumpliría su 30 aniversario. Esta dañina prohibición hace retroceder el tiempo tres décadas y socava aún más los derechos duramente ganados de las personas LGBTIAQ+, en Hungría.
Sólo con nuestra movilización podremos frenar la triste tendencia en la pérdida de derechos dentro de la misma Unión Europea, porque protestar tiene sus frutos.
También os decimos lo que hemos logrado, y es que desde el Orgullo de 2024, Dominica y Namibia han descriminalizado los actos sexuales entre personas del mismo sexo. El matrimonio igualitario se hizo realidad en Tailandia y Liechtenstein.
Finalmente, cayó la última zona homófoba libre de LGBT en Polonia. Más de un millón de personas se unieron a una iniciativa ciudadana para prohibir las prácticas de conversión en toda la Unión Europea. Y todo eso gracias a todes les que hoy estáis aquí.
Cada año miles de personas son asesinadas, perseguidas, torturadas y agredidas por expresar su manera de ser, sentir o amar.
Esto se traduce a que se ven obligadas a dejar sus países de origen con el único propósito de salvar sus vidas y poder amar y ser amados sin miedo.
Es importante indicar hoy aquí que una de las motivaciones o principales causas de los desplazamientos forzados que se dan en el mundo están vinculadas a razones de orientación e identidad sexual.
Por tanto, manifestamos nuestro absoluto rechazo ante cualquier forma de discriminación o violencia producida hacia cualquier persona por razón de sexo, género u orientación sexual.
Es fundamental poner en valor los avances normativos en derechos LGTBIQ+, como la ley 4/2023 para la igualdad real de las personas trans y LGTBIQ+. En su artículo 15 aborda el ámbito laboral y el reciente real decreto 1026/2024 que desarrolla medidas específicas para garantizar la igualdad y la no discriminación en las empresas.
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Estas leyes representan pasos clave para las mejoras de las condiciones de vida y trabajo del colectivo. Sin embargo, aún enfrentamos grandes desafíos. La brecha, el reconocimiento legal y la realidad diaria persiste, y en algunas comunidades autónomas los gobiernos del Partido Popular, con el apoyo de Vox, están promoviendo retrocesos que ponen en riesgo los derechos fundamentales.
Frente a esta amenaza, reforzaremos nuestro compromiso sindical y colectivo.
Este 28 de junio reclamamos todos los derechos para todas las personas, que los avances legales se reflejen en condiciones laborales reales, centros de trabajo libres, seguros y orgullosos, protocolos con perspectiva LGTBI en la negociación colectiva, recursos, formación e información para combatir la discriminación, campañas de sensibilización permanentes, porque sólo desde la acción conjunta construiremos un mundo laboral más justo, inclusivo y digno para todas las personas.
Por todo esto, seguiremos llenando las calles y alzando bien fuerte la voz.
No van a poder con nosotras.
Nuestras armas son más fuertes que su odio.
Porque os lo decimos bien alto y claro.
Ante vuestro odio, nuestro orgullo.
Viva el Orgullo”.
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